El padre Juan de Mariana nació en Talavera de la Reina en 1536. Fue un jesuita, teólogo e historiador. Se cree que fue hijo ilegítimo del deán de la colegiata de Talavera, Juan Martín, y de Bernardina Rodríguez.
Estudió Artes y Teología en Alcalá de Henares, profesó en la Compañía de Jesús en 1554 a la edad de 17 años en Simancas. Acabó su formación sacerdotal en el colegio jesuita de Roma, donde a partir de 1561, con 24 años, y durante 4 años fue uno de sus mejores profesores, contando con alumnos muy ilustres. Más tarde fue enviado como profesor a Palermo en Sicilia durante 2 años y después a París, donde recibió el grado de doctor y permaneció cinco años enseñando Teología sobre todo en la Saint Barthélemy; después estuvo un tiempo en Flandes.
Tras caer enfermo a consecuencia de su intensa actividad como catedrático regresó a Toledo en 1574, en cuyo semiretiro se consagró a la redacción de sus libros.
En todos los sitios en los que estuvo de profesor tuvo grandes elogios por sus enseñanzas.
Era definido como retraído, consumado teólogo, latinista perfecto, profundo conocedor del griego y de las lenguas orientales, literato brillante, estimable economista, político de elevada previsión; con una moral severa y una voz firme e intrépida, que se levanta contra todo linaje de abusos, sin consideraciones a los grandes, sin temblar cuando se dirige a los reyes.
La muerte le sorprendió en 1623 a los ochenta y siete años de edad cuando trabajaba en unos Escolios al Antiguo y Nuevo Testamento, obra de interpretaciones bíblicas.
El Padre Mariana escribió muchos libros y tratados. La versión originaria fue siempre latina. La mayor parte de ellos fueron después traducidos al castellano por el mismo autor. Escribió tratados memorables, publicó y realizó trabajos de depuración de textos, que le dieron fama de erudito y humanista. Pero no le faltaron persecuciones y detractores. Algunas de sus teorías resultaron atrevidas y molestas en su tiempo. Incluso por su obra estuvo preso por la Inquisición. Y especialmente ruidosa fue la polémica que levantó el célebre tratado “El Rey y la Institución Real” (que apareció en latín con el título “De Rege et Regis Institutione”, y él nunca tradujo).
Los escritos que tuvieron mayor resonancia fueron sin duda la Historia de España, De rege et regis institutione y el Tratado y discurso sobre la moneda de vellón.
Obras principales:
1581 Manual para la administración de los sacramentos
1586 De rebus Hispaniae
1599 Edición Grial de las Obras de San Isidoro
1599 De ponderibus mensuris
1599 De rege et regis institutione
1600 Epítome de la biblioteca de Focio
1607 El cronicón de Luca de Tuy
1609 Septem tractatus
Estudió Artes y Teología en Alcalá de Henares, profesó en la Compañía de Jesús en 1554 a la edad de 17 años en Simancas. Acabó su formación sacerdotal en el colegio jesuita de Roma, donde a partir de 1561, con 24 años, y durante 4 años fue uno de sus mejores profesores, contando con alumnos muy ilustres. Más tarde fue enviado como profesor a Palermo en Sicilia durante 2 años y después a París, donde recibió el grado de doctor y permaneció cinco años enseñando Teología sobre todo en la Saint Barthélemy; después estuvo un tiempo en Flandes.Tras caer enfermo a consecuencia de su intensa actividad como catedrático regresó a Toledo en 1574, en cuyo semiretiro se consagró a la redacción de sus libros.
En todos los sitios en los que estuvo de profesor tuvo grandes elogios por sus enseñanzas.
Era definido como retraído, consumado teólogo, latinista perfecto, profundo conocedor del griego y de las lenguas orientales, literato brillante, estimable economista, político de elevada previsión; con una moral severa y una voz firme e intrépida, que se levanta contra todo linaje de abusos, sin consideraciones a los grandes, sin temblar cuando se dirige a los reyes.
La muerte le sorprendió en 1623 a los ochenta y siete años de edad cuando trabajaba en unos Escolios al Antiguo y Nuevo Testamento, obra de interpretaciones bíblicas.
El Padre Mariana escribió muchos libros y tratados. La versión originaria fue siempre latina. La mayor parte de ellos fueron después traducidos al castellano por el mismo autor. Escribió tratados memorables, publicó y realizó trabajos de depuración de textos, que le dieron fama de erudito y humanista. Pero no le faltaron persecuciones y detractores. Algunas de sus teorías resultaron atrevidas y molestas en su tiempo. Incluso por su obra estuvo preso por la Inquisición. Y especialmente ruidosa fue la polémica que levantó el célebre tratado “El Rey y la Institución Real” (que apareció en latín con el título “De Rege et Regis Institutione”, y él nunca tradujo).Los escritos que tuvieron mayor resonancia fueron sin duda la Historia de España, De rege et regis institutione y el Tratado y discurso sobre la moneda de vellón.
Obras principales:
1581 Manual para la administración de los sacramentos
1586 De rebus Hispaniae
1599 Edición Grial de las Obras de San Isidoro
1599 De ponderibus mensuris
1599 De rege et regis institutione
1600 Epítome de la biblioteca de Focio
1607 El cronicón de Luca de Tuy
1609 Septem tractatus
